madre muy bestia machaca una polla joven
A estas alturas de la vida y cuando ya han pasado sobradamente los 40, las maduras no se andan con rodeos y si tienen la oportunidad de pillar una polla joven y vigorosa la apurarán hasta dejarla en carne viva, estas señoras no piensan: seré delicada no vaya a ser que le haga daño al pobre chico… ni de coña tíos, hasta que no hagan trizas vuestra verga no pararán. El encuentro que tenemos hoy es probablemente la fantasía más recurrente de todos nuestros parroquianos más jovencitos, una cita con una mujer de cuarenta y tantos años muy atractiva y con unas ganas terribles de follar de las que te come hasta el ojete si se tercia, ¿se puede pedir algo más?.