Me cogí a mi madrastra en la cocina, ella me dejó
Cuando fui a la cocina me encontré a mi madrastra agachada revisando las tuverías del fregadero. Ver ese culazo allí me la puso bien dura. Me acerqué mostrando curiosidad preguntándole que hacía, pero lo único que me interesaba en realidad era su trasero. Levanté su vestido y luego bajé su tanga, ella para mi sorpresa no se movía ni decía nada. Solo tuve que acercar mi verga para rozarme en ella, me preguntó que hacía, pero era obvio. Luego se levantó, pero yo seguía con la verga bien dura pajeándome.
Viendo lo necesitado que yo estaba me comió el rabo, luego se apoyó sobre la encimera y la penetré. Que gusto metérsela a esa puta, me movía rápidamente dentro de ella hasta que al final me corrí.