La hija de su mejor amigo
Los dos hombres se habían llevado a sus hijas a aquella casa para pasar unos días de vacaciones, pero esas zorritas no se imaginaban lo que se traían entre manos. Entre los dos llegaron a un acuerdo, cada uno podría follarse a la hija del otro. De hecho en realidad lo iban a tener bastante fácil, ya que ellas eran dos buenas putas y les daban morbo los hombres maduros. Uno de ellos de hecho besó a la otra chica en la cocina, hasta que fueron a la habitación. Allí se pudo ver como uno de ellos se follaba a esa jovencita mientras ella gozaba como una perra. Sin duda alguna algo que le contaría a todas sus amigas.
